Siento que los nudos se acumulan en mi garganta, mi espalda
y en uno de mis ojos, el otro se ahoga en terquedad y en una muy engañosa
fortaleza, he cambiado tanto que me
asombro a veces, he resistido tanto que cada día me admiro más, me quiero más,
algunas noches me atropellan los buenos deseos hacia ti, otras no, simplemente me quedo así, prendida
de reservas de esperanza y amor propio intentando desarmar los mitos del amor, mis cuentos de hadas y las opresiones ocultas,
cada noche es un golpe más contra mi historicidad y entiendo que será un
proceso tortuoso pero gratificante, veré la luz estoy segura.
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